
Después de tanto volví a mi clase de TKD, vi a mis queridos compañeros y conocía a los nuevos. Realmente fue un lindísimo día.
Por otro lado, sigo preparándome para dar el gran salto de mi vida quizás, con mucho temor y esperanza, con ilusión y aun sin desencanto. Nadie sabe, por suerte ,y como nadie visita este blog puedo decirlo como si fuera un diario íntimo que recibe mis sentimientos más profundos.
Gracias destino por existir.
Amén.
No conozco a nadie como vos, que me haga ver la realidad así, de la forma más tirada de los pelos pero tan clara y confusa. Ensombreciste mi punto de vista, si antes encontraba cierta claridad al aislar las variables, tu método al ser demasiado comprensivista, para todo el causalismo que el ser agnóstico me dio, me deja con la boca abierta, ante la opinión pública como un pelotudo y ante el público científico como un indolente. Me siento derrotado por ser el único que en esa foto ve el reflejo del sol ante la lente de una cámara fotográfica. No veo ni la estela de un satélite, ni el comunismo que siempre amenaza el cielo capitalista, ni amigos extranjeros de visita por nuestro mundo. Que desamorado que soy, que poco romántico... pero sabes que detrás de tanto materialismo quiero pensar que hay cosas que no tienen explicación.
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